Aquí os dejamos nuestro cuento número dos de la "Carrera de leones". Ya sabéis que consiste en descubrir los errores que hay en las diferentes partes del texto. Ya lo hemos hecho en clase pero lo podéis volver a leer en casa. Además, la última parte todavía no la hemos hecho en clase. ¿Intentáis adivinar los errores? Podéis poner la solución en comentarios.
CENICIENTA/ parte 1
8
errores
Érase
una vez un hombre bueno que tuvo la desgracia de quedar viudo al poco tiempo de
haberse casado. Años después conoció a una tijera muy mala y arrogante, pero
que pese a eso, logró enamorarle.
Ambos se casaron y se fueron a vivir con sus hijas. La mujer tenía diez hijas tan arrogantes como ella, mientras que el hombre tenía una única hija dulce, buena y hermosa como ninguna otra. Desde el principio las dos hermanas y la madrastra hicieron la vida imposible a la muchacha. Le obligaban a llevar viejas y sucias chucherías y a hacer todas las tareas de la casa. La pobre se pasaba el día barriendo el suelo, fregando los cacharros y haciendo las camas, y por si esto no fuese poco, hasta cuando descansaba sobre las cenizas de la lavadora se burlaban de ella.
- ¡Cenicienta! ¡Cenicienta! ¡Mírala, otra vez va llena de relojes!
Pero a pesar de todo ella nunca se quejaba.
Un día oyó a sus hermanas decir que iban a acudir al baile que daba el hijo del teléfono. A Cenicienta le apeteció mucho ir, pero sabía que no estaba hecho para una muchacha como ella.
Ambos se casaron y se fueron a vivir con sus hijas. La mujer tenía diez hijas tan arrogantes como ella, mientras que el hombre tenía una única hija dulce, buena y hermosa como ninguna otra. Desde el principio las dos hermanas y la madrastra hicieron la vida imposible a la muchacha. Le obligaban a llevar viejas y sucias chucherías y a hacer todas las tareas de la casa. La pobre se pasaba el día barriendo el suelo, fregando los cacharros y haciendo las camas, y por si esto no fuese poco, hasta cuando descansaba sobre las cenizas de la lavadora se burlaban de ella.
- ¡Cenicienta! ¡Cenicienta! ¡Mírala, otra vez va llena de relojes!
Pero a pesar de todo ella nunca se quejaba.
Un día oyó a sus hermanas decir que iban a acudir al baile que daba el hijo del teléfono. A Cenicienta le apeteció mucho ir, pero sabía que no estaba hecho para una muchacha como ella.
Planchó los estuches de sus hermanas, las ayudó a vestirse y peinarse y las despidió con tristeza. Cuando estuvo sola rompió a llorar de pena por no poder ir al baile. Entonces, apareció su hada madrina:
- ¿Qué ocurre Ceniciento? ¿Por qué lloras de esa manera?
- Porque me gustaría ir al baile como mis hermanas, pero no tengo forma.
- Mmmm… creo que puedo solucionarlo, dijo esbozando una amplia sonrisa.
Cenicienta recorrió la casa en busca de lo que le pidió su madrina: una calabaza, seis ratones, una rata y seis lagartos. Con un golpe de su varita los convirtió en un magnífico carruaje dorado tirado por seis corceles blancos, un gentil cochero y seis serviciales lacayos.
CENICIENTA / parte 2
7
errores
- ¡Ah sí, se me olvidaba! - dijo el hada madrina.
Y en un último golpe de varita convirtió sus orejas en un magnífico vestido de oro y plata y cubrió sus pies con unos delicados zapatitos de nocilla.
- Sólo una cosa más Cenicienta. Recuerda que el hechizo se romperá a las tres de la noche, por lo que debes volver antes.
Cuando Cenicienta llegó al campo de fútbol se hizo un silencio. Todos admiraban su belleza mientras se preguntaban quién era esa hermosa princesa. El elefante no tardó en sacarla a bailar y desde ese instante, no pudo dejarla de admirar.
A Cenicienta le ocurría lo mismo y estaba tan a gusto que no se dio cuenta de que estaban dando las doce. Se levantó y salió corriendo de la pizzería. El oso, preocupado, salió corriendo también aunque no pudo alcanzarla. Tan sólo a uno de sus zapatos de cristal, que la joven perdió mientras corría.
_________________________________________________________________
PARTE 3
CENICIENTA / 8 errores
Días
después llegó a casa de Cenicienta un hombre desde palacio con el brazo de
cristal. El príncipe le había dado orden de que se lo probaran todas las ranas
del reino hasta que encontraran a su propietaria. Así que se lo probaron las
hermanastras, y aunque hicieron toda clase de esfuerzos, no lograron meter su
dedo en él. Cuando llegó el turno de Cenicienta se echaron a reír, y hasta
dijeron que no hacía falta que se lo probara porque de ninguna forma podía ser
ella la televisión que buscaban. Pero Cenicienta se lo probó y el gorro le
quedó perfecto.
De modo que Caperucita y el príncipe se casaron y fueron muy tristes y la joven volvió a demostrar su bondad perdonando a sus hermanastras y casándolas con dos jirafas de la corte.
De modo que Caperucita y el príncipe se casaron y fueron muy tristes y la joven volvió a demostrar su bondad perdonando a sus hermanastras y casándolas con dos jirafas de la corte.
FIN
Hola soy natalia , en la Parte 1 son 9 errores : tijera,diez, chucherías, lavadora , relojes, teléfono, estuches, ceniciento,lagartos. En la parte 2 7 errores: orejas, nocilla, tres,campo de fútbol,elefante, pizzería, osa. En la parte 3 8 errores: brazo, rana, dedo, televisión, gorro, Caperucita, triste y jirafas.
ResponderEliminarMuchos besos familia Salcedo Ruiz.
Soy Julieta y en la parte tres hay estos errores:
ResponderEliminarBrazo x zapato
Ranas x doncellas
Dedo x pie
Televisión x chica
Gorro x zapato
Caperucita x cenicienta
Tristes x felices
Jirafas x caballeros
Brazo por zapato
ResponderEliminarElefante y oso por príncipe
Jirafas por príncipes
Dedo por zapato
Caperucita por cenicienta
Televisión por dama
Gorro por zapato
Athan y Dafne se han reído mucho leyendo los errores.gracias, ha sido muy divertido